En los procesos internos de selección de candidatos como en toda batalla siempre quedan heridos. Los partidos políticos y sus alianzas podrán jurar misa, decir que van de la mano, que serán institucionales, que trabajaran juntos, pero la realidad es que aquellos que no fueron bendecidos para ver su rostro en la boleta electoral, difícilmente operaran a favor de aquel candidato al que días antes trataron de vencer a toda costa, y tanto Esteban Villegas, de la coalición "Va por Durango", integrada por PRI - PAN y PRD; como Marina Vitela, de la coalición "Juntos haremos historia", integrada por Morena, PT Y PVEM; han dejado tras su batalla un saldo que como en toda contienda tendrá forzosamente una factura que pagar.
En la elección que tendrá lugar este año jugarán factores importantes como el regional, la posibilidad de una gobernadora lagunera pesará en la mancha electoral más grande del estado de Durango, Gómez Palacio y Lerdo. Más si se tiene en cuenta que el candidato de la coalición PRI- PAN- PRD, cuando fue secretario de salud en el sexenio de Jorge Herrera Caldera, tuvo una actividad casi nula en La Laguna y fueron contadas las veces que visitó la región o promovió programas descentralizados, en pocas palabras, como ha sucedido en los últimos gobiernos estatales fue un secretario que no salió de la capital.
Sin embargo, Villegas, a diferencia de la candidata de Morena, Marina Vitela, tiene su bastión en la capital del estado, donde fue alcalde y también promovió una red clientelista que hasta la fecha sigue cautiva con el PRI, y con el poco trabajo para construir estructura del actual gobernador José Rosas Aispuro, un priísta elegido bajo las siglas de Acción Nacional, la que tendrá que trabajar y mucho, para convencer a los electores en la capital, será la candidata de Morena, que no cuenta además con estructura de partido en esa ciudad.
Tal vez el principal problema de Vitela será su compañero de partido, el ex senador José Ramón Enríquez, quien mientras espera la decisión del Tribunal Federal Electoral, luego de que impugnara la designación de la ex alcaldesa de Gómez Palacio como candidata, ya le ha guiñado el ojo a otros partidos, como Movimiento Ciudadano, que se ha convertido en una especie de reciclador de candidatos fallidos, pero que aplicando ciertas estrategias, ha tenido éxito.
A pesar de tener la experiencia de llegar impugnada a una candidatura, como le pasó en la elección por la alcaldía de Gómez Palacio, la candidata de Morena, reduce mucho la posibilidad de ganar la elección si Enríquez decide irse por otro partido, o en su defecto a poyar a la coalición "Va por Durango", algo que no es descabellado si se toma en cuenta el pasado político y las relaciones del senador con licencia, quien además de argumentar que estaba mejor posicionado en las encuestas, está lejos de guardar las formas con Morena, el partido de un presidente cuya amplia popularidad se ha convertido en la esperanza de los candidatos de este año, a pesar de que sean malos o prácticamente desconocidos.
Aunque también el candidato priísta deja un buen número de disgustados en su abanderamiento, empezando por una de las consentidas del gobernador Rosas Aispuro, Mar Grecia Oliva Guerrero, quien tuvo un desempeño gris en la cartera de Comunicación Social de la actual administración y ya se veía en la boleta electoral, por un partido satélite el PRD, pero creyó seriamente que si tenía posibilidades y no que había sido puesta en la encuesta como un mero trámite luego de las negociaciones del PAN y el PRI.
Aunque no tienen una base significativa, pero fueron gobierno, Acción Nacional tendrá que jugar muy bien en está elección, y no dejarle el todo el trabajo al tricolor, por más que este apoyado por Coahuila, este año más que nunca, los programas sociales de la federación se volverán en moneda de cambio durante el proceso electoral.
UN DATO
Una de las jugadas claves para la elección de la gubernatura serán los candidatos a la alcaldía; y en este caso parece ser que en Gómez Palacio la abanderada será la ex alcaldesa Leticia Herrera, una jugada que busca apuntalar el voto de la coalición "Va por Durango" en una ciudad que si bien es gobernada por Morena, tiene una alcaldesa interina, Anabelle Gutiérrez Ibarra, quien no solo tiene bajos niveles de aprobación, sino cuyo nivel de conocimiento en los habitantes de Gómez es casi nulo, por lo que necesitaran más que la ola de Morena para hacerle sombra al nombre de Lety Herrera.