Es recurrente que en las temporadas de regalar, compremos cachorros tanto para nosotros, como para obsequiar, pero en ocasiones ya pasando la euforia del regalo, se dan cuenta que el perrito requiere atención, cuidados de limpieza, comida y un esquema básico de vacunación, o bien compraron un cachorro "hiperactivo" y lo alojamos en un espacio pequeño, por lo cual, este convierte su energía en morder todo lo que encuentra, ya sean plantas, botes, mangueras, puertas, inclusive las llantas de los autos.
Convirtiéndose de un bonito regalo, en un artículo incomodo desechable, lo mismo pasa con perros de talla grande que al crecer demuestran su alegría saltando sobre el dueño, lo cual pasa a ser un "inconveniente" si hay niños pequeños en la casa los cuales llegan a tenerles miedo, evitando no solo jugar con ellos, sino que ya no visitan el área de la casa donde se encuentra la mascota en cuestión.
Algo similar ocurre con personas mayores o que tengan un problema de salud pues temen ser tumbados por los "brincos" y demostraciones de cariño del perro hacia ellos.
Todo lo anterior se debe a que nos falta planeación y orientación acerca de los pros y los contras de cada raza en general y una que otra característica de cada individuo en particular.
Tomemos en cuenta todos los pormenores, desde la "pelecha", (caída natural del pelo), hasta el gasto que representa una mascota cualesquiera que ésta sea pues las personas al no tomar en cuenta lo anterior, cuando tienen el menor inconveniente, tratan de devolver la mascota, o revenderla o regalarla y en algunos casos tirarla a la calle. Les sugiero que antes de comprar alguna mascota o de recibirla como regalo acudan a su médico veterinario y le pregunten acerca de las características de la misma, antes, de llevarla a su casa, lo anterior nos evitará molestias para todos, propietarios y mascotas, y de paso evitaremos que el regalo termine como un animal mas abandonado a su suerte en la calle.
Y ahora para terminar una gota de filosofía: LAS PALABRAS SON EL REFLEJO DEL ALMA, DE LA ABUNDANCIA DEL CORAZON HABLA LA BOCA.